Las mascarillas y los guantes son un tándem básico en la prevención del contagio, como ya te contamos en el artículo “Guantes y mascarillas, protagonistas en la lucha contra el coronavirus”.
Sin embargo, para que su objetivo sea realmente efectivo hay que saber cómo emplearlos. Por ello, en esta entrada del blog desglosaremos algunos conceptos básicos sobre el uso seguro de estos equipos de protección individual (EPI).
Colocarse las mascarillas en 4 pasos
Si bien estamos más habituados a emplear una clase u otra de guantes, las mascarillas no han formado parte del día a día de la gente común hasta ahora. Recopilamos el orden a seguir en la lista siguiente:
1- Lavarse las manos con cuidado antes de colocarse la mascarilla. Se recomienda emplear un par de minutos en la labor.
2- Poner la mascarilla ajustando los elástico detrás de las orejas.
3- Presionar con los dedos alrededor de la nariz para que quede bien ajustada a la forma de la cara y no queden huecos innecesarios.
4- Desplegar la mascarilla por la parte inferior hasta que cubra la barbilla.
No olvides que las mascarillas deben renovarse cada día para que su uso sea eficaz.
La extracción: el último y más importante paso
Una vez hemos empleado el EPI, toda su seguridad recae sobre la capacidad que tengamos de desprendernos de él de la forma correcta.
Por un lado, los guantes deben extraerse sin poner en contacto la parte externa del guante con la interior. Si lo hiciéramos, contaminaríamos la parte limpia.
Por otro lado, en el caso de las mascarillas tampoco debe tocarse el dorso. Más bien, tiraremos de los elásticos.
Cuando nos hayamos desprendido de mascarillas y guantes, es vital depositarlos en un contenedor cerrado. Después, nos volveremos a lavar las manos con insistencia.
Esperamos que estas recomendaciones de uso de mascarillas y guantes ayuden a parar el contagio. Y si aún necesita material para proteger a sus empleados o clientes, le invitamos a que haga su pedido.
Póngase en contacto con nosotros y nos comprometemos a resolver sus dudas.